Hnas./os. de los anzuelos:
En esta fecha y hasta el 01 de enero de 2009 está prohibido pescar. No se puede navegar con ningún elemento de pesca. Por eso hoy quiero compartir con ustedes, una salida de pesca que la hice con hermanos de los anzuelos, en el mes de Agosto en la zona de la ciudad de Bella Vista, Provincia de Corrientes, Argentina.
Allí nos encontramos con el guía Carlos Viccini (fuimos compañeros del colegio secundario) a las 8 de la mañana.
Todo estaba organizado para que Carlos,Ernesto, Hugo y Yo compartiéramos una preciosa pesca. Así pescamos: Yo, 5; Ernesto, 4; Carlos, 3 y Hugo, 2. Totalizamos 14 dorados, realmente formidables.
Pescamos dese las 08:30hs. a las 18:40 hs.
Equipos: cañas de grafito, pasahilos de titanio, acción de punta (se dobla el primer tercio-puntera) de hasta 30lbs.de 2,10 mts. de largo, reels rotativos con buen sistema de freno y capacidad de carga de 200mts de nylon 0.40mm, anzuelos fuertes.
Aquí les dejo un resumen.
En la foto se observa parte del lugar elegido para nuestros primeros intentos.
Bocas de riachos, con vegetación costera y obstáculos.
Dejaríamos que la embarcación transite con el motor apagado, a pocos metro de la costa y en cada lugar descubierto como adecuado "golpear" con la carnada, después de hacerla "volar" impulsándola con la caña, como cuando hacemos lanzamientos para spinning o Bait cast.
El ¡CHAS! del agua al caer el encarne, despierta el instinto cazador del "Lingote de oro con escamas". Los "tiros" no son largos, 15 o 20 metros. resultan suficiente. Si la embarcación se desacomoda un poco se la corrige con remos o motores eléctricos. Debe mantener la distancia adecuada.
Lanzábamos hacia los puntos donde el agua toma una aceleración producto del choque de la corriente con algún obstáculo natural. Ramas,troncos, salientes costeros, etc..
Este fenómeno hace que allí el líquido gane en oxigenación.
En post anteriores describíamos al dorado como un pez que demanda aguas bien oxigenadas.
Sabiendo que bajo estas condiciones habia que sondearlos allí, volaban nuestros encarnes intentando ser lo más precisos posibles.
Si caen antes no lo atacan, si nos pasamos corremos riesgo de enganchar en esos lugares sólidos, y para recuperarlos debemos acercar la embarcación generando alboroto que espanta y resulta contraproducente en nuevos intentos.
Ya cuando se había decidido cambiar de lugar, hago un último intento, tenía fe que en ese sitio debía estar alguno (dorado) esperando una presa (sabalitos, boguitas, tarariras, bagrecitos, morenitas, cascaruditos, etc.).
El estilo (al golpe)consiste en lanzar con precisión, dejar actuar y recoger para volver a repetir la acción.
Y,...¡ZZZZZAAAAAAAAS!!!!!!!!!. la linea sale disparada como si se hubiera enganchado en la cola de un avión. ¡IMPREEEEESIOOOOONAAAANTE!.
Trabo el tambor del reel, cañeo fuerte y,...como si fuera un misil disparado por un submarino, una cabezota pegada a un cuerpo amarillo emerge en una explosión acuosa elevándose unos 50cm sobre el nivel del río, hace una voltereta en el aire y se clava de cabeza desapareciendo.
De ahí en más, sacó linea a lo loco. Lo aguanté como pude, y se repitió la escena inicial tantas veces que ya no recuerdo.
Si recuerdo la emoción en toda la tripulación.
Ya al borde de la lancha, Carlos se encargó de asirlo de la parte anterior de la aleta caudal y levantarlo para la foto. Pulgar hacia arriba y al agua.
Camalotes (planta acuática) en la costa, temperatura cálida, riachos del Paraná, son óptimos lugares para buscar a la boga y al pacú.
En esta modalidad lo haríamos anclados y los equipos se achican.(descripción cuando hablemos de variada).
Si bien fuimos a buscar al dorado, no perdimos la oportunidad de intentar con estas especies muy bonitas de pescar.
Hugo logró un pacucito hermoso, hasta creo que bailó de la alegría.
"Hace 15 años que no saco uno...". Exclamó eufórico.
Todos los felicitamos y obsequiamos abrazos.
Completó con dos bogas más y un bagre amarillo.
Allí obtuvimos: Ernesto, un bagre amarillo; Por mi parte una boga y un pacú que cortó ya sobre la lancha. Pero hoy solo hablaré de los dorados.
Carlos mi gran hermano de los anzuelos(guía de pesca de la ciudad de Bella Vista-Ctes), en los preparativos de los apetitosos sandwich, que con gran placer y hambruna nos encargamos de devorar. Ni aún aquí dejamos de tener los anzuelos en el agua.
¡Cómo nos gusta pescar!!!!!!.
Fué el momento de diagramar estrategias de pesca para las horas que quedaban.
Nos planteábamos si seguir en los brazos del Paraná o ir directamente a su canal, para iniciar una flotada.
Después de calmarnos gastronómicamente, decidimos salir al canal del Paraná.
Esta zona amplia, la recorreríamos en la modalidad que los lugareños la denominan "a camalote", "al garete" o "a pindá"(en idioma guaraní significa anzuelo). No es más que dejarse llevar por la fuerza de la corriente, desplazándose con el motor apagado, los anzuelos rozando el fondo con el carrete suelto (sin trabar) mientras los anzuelos encarnados van sacando nylon de la reserva.
Las espectativa de algún grande estaba latente.
Y fué así nomás. Le había dado realmente bastante nylon, aproximadamente 60 0 70 metros, cuando siento una energía que me trasmitió desde el hombro para abajo como si se me desprendería todo.
El reel que no paraba de "chillar", yiiiiiiiiiii, yiiiiiiiiiiiiii, yiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii.(una de las músiquitas que más me halaga escuchar).
Cuando intuí que era el momento, trabé el carrete con el seguro, la línea se tensó y la caña se desplazó firme y decidida hacia atrás. Fué en el instante en que de reojo miré la puntera, que intentaba dibujar una U, ella también estaba viva y decidida a colaborar.
Con el freno regulado (no ajustado como para frenar la salida), aguanté el primer embate, la bestía salvaje quitaba reserva, estaba aún con todo el ímpetu. No debía presionar con el pulgar sobre el carrete, haría que la brega concluyera (a tener muy en cuenta).
A lo lejos una figura amarilla y corpulenta emergío de las aguas del Paraná como expulsada por la erupción de un volcán.
En el truker todo era alegría. Carlos, Ernesto y Hugo retiraban velozmente sus filamentos. La cancha debía quedar libre para traerlo a la embarcación.
Pintó todo alrededor con cada salto, de sus múltiples dados antes de ser levantado. Nunca se rindió, solamente fue "vencido". Merecimiento más que suficiente para regresar a "casa"(río).
Además, fué el más grande de la jornada. Un fiel exponente del "lingote de oro con escamas".
Aquí con Carlos, con uno más de los tantos logrados aquel maravilloso día. Fué verdaderamente espectacular!!!!.
Una verdadera pintura los tonos que toman sus escamas cuando el sol decide acariciarlas. Otro más al agua. Clic y chapuzón.
Y los dorados seguían apareciendo. El cardúmen se mantenía en el lugar, nosotros barríamos la zona gareteando.
Sentí la fuerza en el final de mi línea, la corrida a lo fórmula uno y el cañazo firme para posibilitar la clavada en las partes óseas y duras de sus fauces.
A partir de allí, corridas, saltos, cabezasos y destellos cubriendo el entorno. El coloso había sido prendido. Despué del final, devuelto. En la foto, segundos antes de ello. Carlos escoltándome y Hugo de espaldas, buscando el suyo (obtuvo -2-)
Carlos por culminar la tarea. Nosotros, después de haber retirado nuestras lineas del río para facilitar todo, atinábamos a alentarlo con varios,..."tranquilo Carlos, no te apure",..."vamos Carlos que ya está",...
Se dió justo después de una caída o veril, desnivel del fondo del río. El terreno tiene una marcada depresión y es lugar de acecho de los grandes "tigre de los rios".
Junto a Ernesto posando con un doblete de dorados para rápidamente devolverlos.
Fué emocionante y por momentos de mucha tensión, ya que en estos casos se debe tener cuidado para evitar enriedos de los filamentos, que traería algún corte seguro.
Ambos teníamos a 40 0 50 metros de la embarcación, los saltos frenéticos de los peces ahora pescados). Faltaba todo, traerlos a destino. Así fué.
Nos corrimos unos 300 metros hacia la derecha, un sector con menos profundidad, pero que habíamos detectado actividad.
Como guardafaunas, estaban allí sobre unos troncos y ramas caídas,...los biguáes. Aves de color negro oscuro, grandes comedores de mojarrones y pequeños pececillos.
En ese lugar cobré este último dorado, aquí presto a ser devuelto al río, mientras Carlos intenta una nueva clavada.
De regreso, Carlos, Yo y Ernesto. Los corazones normalizaos después de latir a mil. Felices por la pesca y por haber devueltos todos al agua (está permitido la extracción de un ejemplar de entre 65cm y 80cm).
Atrás quedó el equilibrio.
Como un mojón de referencia histórica, la caña se mantenía inerte después de una larga e intensa jornada.
Su misión estaba cumplida.
El reel, fiel pareja, abrazado como no queriendo abandonar la danza, ese contoneo armonioso desplegado hacia adelante y hacia atrás, marcado por las manos eruditas del pescador cada vez que forzaba atraer la captura..
La linea, dormía al igual que el anzuelo,...debían descansar, había sido fatigoso para ellos. Es que también arriesgaron sus "vidas". Allí yacían, tal vez soñando en su quietud, por alguna nueva salida. Otra vez al agua, otra vez arriesgando, otra vez en busca de la ocasional presa, aunque después decidirían en conjunto (con el pescador), reconocer en el animal, el grato momento vivido,...para que sigan pintando las aguas de amarillo. La naturaleza, con esa inconmensurable bondad que la caracteriza eternamente, daba las últimas pinceladas de oro. El sol también quiso dejar su rúbrica en la obra.
Los dorados, vueltos misterios, seguramente harían lo propio bajo la superficie del majestuoso Paraná.
Es que todo, todo, fué teñido de amarillo,... creo que de sufrir un cortecito en ese momento, mi sangre brotaría del color de "los lingotes de oro con escamas".
Desde la Provincia de Corrientes, Argentina,
Con infinito cariño,
♪¡Unos chamamés!♪,
Un abrazo gigante y,...
Un afectuoso sapukái.-
En esta fecha y hasta el 01 de enero de 2009 está prohibido pescar. No se puede navegar con ningún elemento de pesca. Por eso hoy quiero compartir con ustedes, una salida de pesca que la hice con hermanos de los anzuelos, en el mes de Agosto en la zona de la ciudad de Bella Vista, Provincia de Corrientes, Argentina.
Allí nos encontramos con el guía Carlos Viccini (fuimos compañeros del colegio secundario) a las 8 de la mañana.
Todo estaba organizado para que Carlos,Ernesto, Hugo y Yo compartiéramos una preciosa pesca. Así pescamos: Yo, 5; Ernesto, 4; Carlos, 3 y Hugo, 2. Totalizamos 14 dorados, realmente formidables.
Pescamos dese las 08:30hs. a las 18:40 hs.
Equipos: cañas de grafito, pasahilos de titanio, acción de punta (se dobla el primer tercio-puntera) de hasta 30lbs.de 2,10 mts. de largo, reels rotativos con buen sistema de freno y capacidad de carga de 200mts de nylon 0.40mm, anzuelos fuertes.
Aquí les dejo un resumen.
En la foto se observa parte del lugar elegido para nuestros primeros intentos.
Bocas de riachos, con vegetación costera y obstáculos.
Dejaríamos que la embarcación transite con el motor apagado, a pocos metro de la costa y en cada lugar descubierto como adecuado "golpear" con la carnada, después de hacerla "volar" impulsándola con la caña, como cuando hacemos lanzamientos para spinning o Bait cast.
El ¡CHAS! del agua al caer el encarne, despierta el instinto cazador del "Lingote de oro con escamas". Los "tiros" no son largos, 15 o 20 metros. resultan suficiente. Si la embarcación se desacomoda un poco se la corrige con remos o motores eléctricos. Debe mantener la distancia adecuada.
Lanzábamos hacia los puntos donde el agua toma una aceleración producto del choque de la corriente con algún obstáculo natural. Ramas,troncos, salientes costeros, etc..
Este fenómeno hace que allí el líquido gane en oxigenación.
En post anteriores describíamos al dorado como un pez que demanda aguas bien oxigenadas.
Sabiendo que bajo estas condiciones habia que sondearlos allí, volaban nuestros encarnes intentando ser lo más precisos posibles.
Si caen antes no lo atacan, si nos pasamos corremos riesgo de enganchar en esos lugares sólidos, y para recuperarlos debemos acercar la embarcación generando alboroto que espanta y resulta contraproducente en nuevos intentos.
Ya cuando se había decidido cambiar de lugar, hago un último intento, tenía fe que en ese sitio debía estar alguno (dorado) esperando una presa (sabalitos, boguitas, tarariras, bagrecitos, morenitas, cascaruditos, etc.).
El estilo (al golpe)consiste en lanzar con precisión, dejar actuar y recoger para volver a repetir la acción.
Y,...¡ZZZZZAAAAAAAAS!!!!!!!!!. la linea sale disparada como si se hubiera enganchado en la cola de un avión. ¡IMPREEEEESIOOOOONAAAANTE!.
Trabo el tambor del reel, cañeo fuerte y,...como si fuera un misil disparado por un submarino, una cabezota pegada a un cuerpo amarillo emerge en una explosión acuosa elevándose unos 50cm sobre el nivel del río, hace una voltereta en el aire y se clava de cabeza desapareciendo.
De ahí en más, sacó linea a lo loco. Lo aguanté como pude, y se repitió la escena inicial tantas veces que ya no recuerdo.
Si recuerdo la emoción en toda la tripulación.
Ya al borde de la lancha, Carlos se encargó de asirlo de la parte anterior de la aleta caudal y levantarlo para la foto. Pulgar hacia arriba y al agua.
Camalotes (planta acuática) en la costa, temperatura cálida, riachos del Paraná, son óptimos lugares para buscar a la boga y al pacú.
En esta modalidad lo haríamos anclados y los equipos se achican.(descripción cuando hablemos de variada).
Si bien fuimos a buscar al dorado, no perdimos la oportunidad de intentar con estas especies muy bonitas de pescar.
Hugo logró un pacucito hermoso, hasta creo que bailó de la alegría.
"Hace 15 años que no saco uno...". Exclamó eufórico.
Todos los felicitamos y obsequiamos abrazos.
Completó con dos bogas más y un bagre amarillo.
Allí obtuvimos: Ernesto, un bagre amarillo; Por mi parte una boga y un pacú que cortó ya sobre la lancha. Pero hoy solo hablaré de los dorados.
Carlos mi gran hermano de los anzuelos(guía de pesca de la ciudad de Bella Vista-Ctes), en los preparativos de los apetitosos sandwich, que con gran placer y hambruna nos encargamos de devorar. Ni aún aquí dejamos de tener los anzuelos en el agua.
¡Cómo nos gusta pescar!!!!!!.
Fué el momento de diagramar estrategias de pesca para las horas que quedaban.
Nos planteábamos si seguir en los brazos del Paraná o ir directamente a su canal, para iniciar una flotada.
Después de calmarnos gastronómicamente, decidimos salir al canal del Paraná.
Esta zona amplia, la recorreríamos en la modalidad que los lugareños la denominan "a camalote", "al garete" o "a pindá"(en idioma guaraní significa anzuelo). No es más que dejarse llevar por la fuerza de la corriente, desplazándose con el motor apagado, los anzuelos rozando el fondo con el carrete suelto (sin trabar) mientras los anzuelos encarnados van sacando nylon de la reserva.
Las espectativa de algún grande estaba latente.
Y fué así nomás. Le había dado realmente bastante nylon, aproximadamente 60 0 70 metros, cuando siento una energía que me trasmitió desde el hombro para abajo como si se me desprendería todo.
El reel que no paraba de "chillar", yiiiiiiiiiii, yiiiiiiiiiiiiii, yiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii.(una de las músiquitas que más me halaga escuchar).
Cuando intuí que era el momento, trabé el carrete con el seguro, la línea se tensó y la caña se desplazó firme y decidida hacia atrás. Fué en el instante en que de reojo miré la puntera, que intentaba dibujar una U, ella también estaba viva y decidida a colaborar.
Con el freno regulado (no ajustado como para frenar la salida), aguanté el primer embate, la bestía salvaje quitaba reserva, estaba aún con todo el ímpetu. No debía presionar con el pulgar sobre el carrete, haría que la brega concluyera (a tener muy en cuenta).
A lo lejos una figura amarilla y corpulenta emergío de las aguas del Paraná como expulsada por la erupción de un volcán.
En el truker todo era alegría. Carlos, Ernesto y Hugo retiraban velozmente sus filamentos. La cancha debía quedar libre para traerlo a la embarcación.
Pintó todo alrededor con cada salto, de sus múltiples dados antes de ser levantado. Nunca se rindió, solamente fue "vencido". Merecimiento más que suficiente para regresar a "casa"(río).
Además, fué el más grande de la jornada. Un fiel exponente del "lingote de oro con escamas".
Aquí con Carlos, con uno más de los tantos logrados aquel maravilloso día. Fué verdaderamente espectacular!!!!.
Una verdadera pintura los tonos que toman sus escamas cuando el sol decide acariciarlas. Otro más al agua. Clic y chapuzón.
Y los dorados seguían apareciendo. El cardúmen se mantenía en el lugar, nosotros barríamos la zona gareteando.
Sentí la fuerza en el final de mi línea, la corrida a lo fórmula uno y el cañazo firme para posibilitar la clavada en las partes óseas y duras de sus fauces.
A partir de allí, corridas, saltos, cabezasos y destellos cubriendo el entorno. El coloso había sido prendido. Despué del final, devuelto. En la foto, segundos antes de ello. Carlos escoltándome y Hugo de espaldas, buscando el suyo (obtuvo -2-)
Carlos por culminar la tarea. Nosotros, después de haber retirado nuestras lineas del río para facilitar todo, atinábamos a alentarlo con varios,..."tranquilo Carlos, no te apure",..."vamos Carlos que ya está",...
Se dió justo después de una caída o veril, desnivel del fondo del río. El terreno tiene una marcada depresión y es lugar de acecho de los grandes "tigre de los rios".
Junto a Ernesto posando con un doblete de dorados para rápidamente devolverlos.
Fué emocionante y por momentos de mucha tensión, ya que en estos casos se debe tener cuidado para evitar enriedos de los filamentos, que traería algún corte seguro.
Ambos teníamos a 40 0 50 metros de la embarcación, los saltos frenéticos de los peces ahora pescados). Faltaba todo, traerlos a destino. Así fué.
Nos corrimos unos 300 metros hacia la derecha, un sector con menos profundidad, pero que habíamos detectado actividad.
Como guardafaunas, estaban allí sobre unos troncos y ramas caídas,...los biguáes. Aves de color negro oscuro, grandes comedores de mojarrones y pequeños pececillos.
En ese lugar cobré este último dorado, aquí presto a ser devuelto al río, mientras Carlos intenta una nueva clavada.
De regreso, Carlos, Yo y Ernesto. Los corazones normalizaos después de latir a mil. Felices por la pesca y por haber devueltos todos al agua (está permitido la extracción de un ejemplar de entre 65cm y 80cm).
Atrás quedó el equilibrio.
Como un mojón de referencia histórica, la caña se mantenía inerte después de una larga e intensa jornada.
Su misión estaba cumplida.
El reel, fiel pareja, abrazado como no queriendo abandonar la danza, ese contoneo armonioso desplegado hacia adelante y hacia atrás, marcado por las manos eruditas del pescador cada vez que forzaba atraer la captura..
La linea, dormía al igual que el anzuelo,...debían descansar, había sido fatigoso para ellos. Es que también arriesgaron sus "vidas". Allí yacían, tal vez soñando en su quietud, por alguna nueva salida. Otra vez al agua, otra vez arriesgando, otra vez en busca de la ocasional presa, aunque después decidirían en conjunto (con el pescador), reconocer en el animal, el grato momento vivido,...para que sigan pintando las aguas de amarillo. La naturaleza, con esa inconmensurable bondad que la caracteriza eternamente, daba las últimas pinceladas de oro. El sol también quiso dejar su rúbrica en la obra.
Los dorados, vueltos misterios, seguramente harían lo propio bajo la superficie del majestuoso Paraná.
Es que todo, todo, fué teñido de amarillo,... creo que de sufrir un cortecito en ese momento, mi sangre brotaría del color de "los lingotes de oro con escamas".
Desde la Provincia de Corrientes, Argentina,
Con infinito cariño,
♪¡Unos chamamés!♪,
Un abrazo gigante y,...
Un afectuoso sapukái.-
7 comentarios:
Hermosa salida, hermoso relato y hermosas fotos.
Mis más sinceras felicitaciones por el informe y por el blog en general.
Aprovecho la ocasión para mostrarte mi blog dedicado al spinning, recién está en sus inicios:
http://spinningmania.com.ar/
Un cordial saludo.
Nicolás.
Hermosa salida, hermoso relato y hermosas fotos.
Mis más sinceras felicitaciones por el informe y por el blog en general.
Aprovecho la ocasión para mostrarte mi blog dedicado al spinning, recién está en sus inicios:
Spinning Manía
Un cordial saludo.
Nicolás.
Vaya tela neng!!
Vaya dorados!!
Felicidades!!
un abrazo
Prezado Léo,
Como já disse antes, és um privilegiado por ter tão perto essa quantidade de Dourados, num lugar tão belo.
Parabéns pela pescaria e pelo relato cheio de dicas técnicas e emoção.
Um grande abraço
Espectacular salida Leo, muy lindos dorados y grupo de pesca!!!!!!!
No sabía que empezaba la veda. Te mando un abrazo y que linda que es la pesca del dorado, ya me vas a tener por tus pagos.
Joderrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr, Leo que envidia me das cuando te veo con esos "lingotes" de oro en tus manos. Precioso y emocionante relato, amigo con buenisimas fotos.
Sigue cuidando de ese oro que tienes.
Un abrazo Hermano
Barbux
Hnos. de los anzuelos:
Nico:Bienvenido y gracias por estar, te espero siempre.
Raúl: siempre me alegra tu visita.
Juniors: me pone contento que te haya sido útil.
Second: Corrientes te espera y ojala cuando vengas disfrutes mucho.
Barbux: querido españolísimo, los lingotes también son tuyos. ¡Viva Hueznar! (tú me entiendes).
A todos: muchas gracias y,...
Un afectuoso sapukay.-
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