EL SIEMPRE BELLO ARUHARY

Hnos. de los anzuelos:
Mi (Nuestro) amado río Aruhary después de hacerse muy "gordo" comenzó su "régimen" para estar en forma.
Está en bajante, acomodándose como más le gusta.
Con Gustavo, una vez más, decidimos salir en búsqueda de "lingotes de oro con escamas".
Bien tempranito, a las 05:00hs de la matina estábamos con los ojos bien abiertos y el corazón latiendo con emoción.
Llegamos al Club. Cuando estábamos a punto de zarpar, Panta se nos apareció con ese andar tranquilo y la sonrisa en su rostro que lo caracteriza.
-¡Mbaépa ricó Panta! (saludo en lengua Guaraní -Cómo andás Panta).
-¡Porante ja ndé, Leo! (bien y vos, Leo).
El saludo se repitió con Gus.

Salimos con el motor sin arrancar, dejando que la fuerza de la corriente nos haga derivar caprichosamente, solo algunas correcciones con el remo. ¡¡¡Qué placer!!!,...¡¡¡Qué placer!!!,...Todo tan natural.
Estaba amaneciendo, aunque el Sol aún no se presentaba.

Gustavo clavó el primero, un pirá pytá chiquito pero remolón. Justo en la entrada de un riachito después de una cortita deriva a través de una corredera.

El día "vestía" precioso, como habiéndose engalanado para nosotros.
La mosca cayó y apenas produjo el chasquido, ¡¡Plaaaash!! una "guillotina" se le abalanzó muy voráz.
-¡Mmmmmm, esto se puede poner complicado para nustras moscas! (comenté a Gustavo). En el transcurso de la jornada aparecieron un par más. Habían regresado, pero tirando bien metido en las correderas y no haciéndolas pasar por aguas más lentas, nuestras moscas escaparían de sus fauces.

Miré con atención otra corredera sercana, realizé un bakcast y otroa hacia adelante y mosca al agua con deriva cortita,...¡¡Plaaash!1,...¡Lingotito!!.
Esto me reafirmó la confianza en que haciéndo bien las "cosas" las guillotinas (a pesar de estar presentes) no nos incomodarían tanto. ¡¡¡Menos mal!!!. ¡Pobres moscas sino!.

Pusimos en marcha el motor y fuimos a buscar otras correderas. Nos anclamos luego de elegir bien el lugar, y las moscas volaron por los aires.
A poco de realizar pasadas, los saltos, acrobacias y corridas eran la "moneda corriente".

Verlos regreesar con el menor daño posible (el pichazo es inevitable si se los pesca) llenan los ojos de una de las más bellas imágenes que se pueda ver en esta actividad.

Varios fueron los que tras el empleo de sus astutos recursos naturales,...se fueron antes de que podamos tocar sus escamas. mejor así, para que la pesca siga siendo cautivante. ¡¡¡Cómo me gusta que así sea!!!. Algunas veces nosotros, algunas veces los "lingotes". ¡Como debe ser!.

Nuestro "hermano de los anzuelos" el sol nos acompañaba con sus caricias, para mantener templadas nustros espíritus. Es que con sus rayos nos da una mano para hacer más visibles nuestras moscas a los ojos del "lingote",...¡Qué generoso es!.

Mientras hacíamos otra de nuestras flotadas, una encantadora bandada de garzas revolotearon sobre nuestras cabezas. Todo se volvía encantador en el Aruhary. Cada vez que estamos inmersos en su entorno, no dan ganas de regresar,...queremos quedarnos allí para siempre.

Por momentos las moscas debían ser reemplazadas tras las "ejecuciones" de las "guillotinas de los ríos" (palometas).

Mientras observaba a Gustavo cambiando serenamente su mosca después de elegir la que consideraba sería la eficáz, me dediqué a preparar los amargos (mate) más ricos,...los que se toman flotando (o a la vera) un río.
Calman la sed y profundizan el sentimiento de afecto entre "hermanos de los anzuelos". Los Guaraníes lo tomaban en calabacitas,...como nosotros, ja, ja, ja.
Las horas habían transcurridos y nuestro "hermano" sol se ponía más caliente. Era el momento para cambiar la gorra por mi viejo sombrero de paja. Para mi, lo mejor que se puede tener en la cabeza cuando el sol "pega" en serio en estas zonas. lo tengo hace más de veinte (20) años, desde cuando una señora que vivía en el campo me lo construyó artesanalmente. Lo uso en los veranos muy cálidos.


Las moscas seguían volando y los "lingotes" deleitándonos con saltos, piruetas, destellos fulgorosos y emociones brotadas por cada poro de la piel, entre charlas, risas y muchos comentarios sobre,...PESCA y,...la vida misma.

Llegaba el momento para buscar una sombra. Nos adentramos por la "boca" de un riacho. A puro remo localizamos el lugar, un par de arbustos crecido sobre una taipa (terraplén construido para retener agua en una vieja plantación de arroz). Allí degustamos algo después de dar los últimos sorbos al mate y nos tomamos un descansito escuchando algo de música salida de una pequeña radio aprovechando una brisa en "las alturas".

Recorrer el lugar es encontrarse con bellezas naturales "pintadas" por la mejor "artista" del mundo,...la Madre Natura.

Nuevamente intentando pescar, nos acomodamos en un nuevo riacho con muy buenas correderas. Unía con sus dos "puntas" el canal principal. Allá fueron nuestras moscas. Panta (encragado del club) había decidido también salir a pescar. Lo vimos (junto a su esposa e hijita) a unos ciento de metros metido en el canal, después desaparecíó, buscando otros lugares.

Los intentos no tardaron en dar sus frutos, ...y muchos. Gran cantidad de "lingotes " metidos en las aguas rápidas y bien oxigenadas. ¡¡Cómo le apetece estar allí!!. Las moscas se las deben ubicar con cierta precisión para evitar reiterados enganches. Recorrimos todo el riacho cambiando de lugar después de varios lanzamientos en cada "punto" con las líneas de flote .Iniciamos probando yo con shooting, pero los enganches me hicieron desistir ya que los intentos fueron por lugares de no mucha profundidad).

¡Cuánto te quiero mi (nuestro) lindo Aruhary!.
Estar en este lugar es cargarse el alma de olores, cantos, sonidos, caricias, imágenes, colores,...¡¡¡VIDA!!!.
Regresamos con eso,...¡¡¡LLENOS DE VIDA!!!.-
Desde la provincia de Corrientes, Argentina,
Con el cariño de siempre,
Un abrazo gigante y,...
Un afectuoso sapukay.
Leo Kutú.-